El argumento del líder ruso para llevar a cabo la invasión ha sido, primero, que Rusia está rodeada de países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y el futuro e hipotético ingreso de Ucrania en esa alianza dejaría a Moscú en peligro. Otro argumento ha sido que Ucrania es un territorio que pertenece a Rusia. Pero ni Ucrania ni la OTAN han dado muestras de querer agredir a Rusia durante las tres últimas décadas, y además Kiev declaró su independencia de la URSS con el consentimiento ruso hace más de 30 años. La propia Rusia se independizó de la URSS, de igual manera en la misma época.

En este mismo sentido, las naciones de Europa del este que fueron parte de la URSS o sus aliadas durante la Guerra Fría, se han integrado a la OTAN no para agredir a Rusia, sino todo lo contrario. Todas ellas temen ser agredidas por Rusia.

Otros hechos han sido también muy reveladores en el tema que nos ocupa. Por ejemplo, dos mandatarios suramericanos de ideas radicalmente opuestas viajaron a Rusia y expresaron su amistad con Putin, poco antes de la invasión a Ucrania. Ellos son el derechista presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el izquierdista presidente de Argentina, Alberto Fernández. Por otra parte, las tres dictaduras que aun prevalecen en América Latina, el castrocomunismo de Cuba, el chavismomadurismo de Venezuela, y el orteguismosandinista de Nicaragua, las tres de extrema izquierda y de fuertes posiciones antinorteamericanas, han dado su respaldo a Rusia. Las tres han tenido magníficas relaciones con Moscú durante muchos años.

Por otra parte, la alianza de Putin con el dictador sirio Bashar-al-Asad es también muy reveladora de las inclinaciones del dirigente ruso. Según Amnistía Internacional, entre diciembre de 2019 y marzo de 2020, los gobiernos sirio y ruso lanzaron una ofensiva militar brutal en el noroeste de Siria que obligó a casi un millón de personas a huir de sus casas y exacerbó una situación humanitaria que ya era terrible. Muchos de esos ataques se perpetraron con armas químicas. En realidad, 13 millones de personas requieren ayuda humanitaria en Siria y el 90 por ciento de la población vive en la pobreza, de acuerdo con la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.

https://www.contactomagazine.com/cafeimpresso/vladimir-putin-es-de-derecha-o-izquierda0322.htm#.Y5NYAHbMJD8